Plantas para cercos

Las plantas para cercos son aquellas que delimitan los topes de tu jardín y lo rodean por todo su contorno, bordeándolo y marcando sus límites, como si se tratara de un muro. Generalmente puedes cercar tu jardín con casi cualquier tipo de plantas, sin embargo existen algunas características obligatorias que deben tener todas esas plantas usadas para cercar el terreno. Las dos más esenciales son: tamaño y volumen. Esto es debido a que la finalidad de los cercos hechos de plantas es la de proteger los límites de tu jardín o terreno, por lo que deben marcar una barrera visible y abundante entre éste y el exterior. Evidentemente ésta finalidad ha ido siendo cada vez más innecesaria con el paso del tiempo y el avance de la tecnología por lo que ahora la mayoría de las veces se utilizan plantas para crear cercos de forma meramente estética.

Otra de las razones por las que se cercan casas y jardines con plantas es ni más ni menos que mantener la privacidad de la propiedad, ya que entre tanta maraña de ramas y hojas se hace casi imposible ver algo, por lo que es algo muy práctico a la hora de añadir algo de privacidad a los patios al descubierto de las casas o los chalets.

53399793af68b_635_476!

Plantas para cercos más comunes

Los tipos de plantas para cercos que más se suelen usar son las siguientes: La ligustrina, la lavanda, el romero, el ajenjo, la ruda o el Laurentino, entre muchos otros. El por qué es sencillo: son plantas muy altas y robustas las cuáles plantadas en ordenadamente y en hileras crean una perfecta pared natural de plantas para cercar cualquier tipo de terreno. Además, muchas de estas plantas son aromáticas por lo que además tendrás un patio o un jardín con ambientador natural. Por último, cabe destacar también el rápido crecimiento de las mismas, perfecto para los momentos de mantenimiento del cerco en los que tendrás que podar una gran cantidad de las plantas que hay en él.

¿Cómo hacer un cerco para tu jardín?

La tarea de realizar un cerco es más sencilla de lo que parece ya que sólo debes sembrar las plantas escogidas para el cerco en hileras de borde a borde y muy próximas las unas a las otras, intentando crear la forma más parecida a un muro. Sin embargo, si no dispones de los conocimientos suficientes siempre puedes contactar con profesionales cualificados los cuáles se encargarán de todo lo respectivo a las plantas para cercos.

¿Qué opinas tú?

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *