Mano de buda como se come

¿Te cuestiones por qué razón está incrementando el consumo de limones a través de Buda en comparación con los limones habituales?

Como comentábamos antes, los limones a través de Buda tienen un aroma muy fuerte, una fragancia que mezcla los aromas de los limones habituales con los de azahar. Este suceso, sumado a los toques agridulces que este limón puede dar a cualquier plato, son las primordiales causas por las que los limones a través de Buda se convirtieron en indispensables en la cocina de creador.

Origen del limón a través de Buda

El limón a través de Buda procede de los países asiáticos. En la antigüedad, este citrino se utilizaba como símbolo de riqueza, felicidad y longevidad. También, la mayor parte de los fieles lo usaban como ofrenda a los dioses. Varios, por su nombre, la asocian con el limón, pero la verdad es que la mano de Buda no posee semillas. Esto se origina por que la flor no fué fecundada como el pistilo de la planta estéril.

Se encuentra dentro de las variedades menos recurrentes y se semeja a manos entrelazadas. No posee pulpa, en consecuencia no posee jugo, en contraste a otros géneros de cítricos. Tu piel es la clave, puesto que es donde está todo el gusto de los alimentos.

La mano de Buda es un cítrico rarísimo. La manera esférica desaparece para ofrecer paso a una sucesión de cinco a veinte tentáculos o dedos que cuelgan de la parte de abajo. En contraste a la lima o el limón, no posee jugo ni pulpa, tiene un color amarillento y una corteza despacio y esponjosa. Más allá de que puede escucharse poco entretenido no tener la parte mucho más jugosa de la fruta, lo cierto es que toda la mano de Buda es comible.

Gracias a esta falta de pulpa, el fruto es bastante menos amargo que otros cítricos y sus usos van desde la piel confitada, su ralladura en postres o sus esencias en asados, infusiones…

Efecto analgésico

Así como se recopila en un producto anunciado en Journal of Agricultural and Food Chemistry, los cítricos como la mano de buda tienen un contenido elevado en flavonoides. Estos son especialmente populares por su acción calmante, que puede contribuir a achicar ciertos géneros de mal.

Los cítricos tropicales, como la mano de Buda, asimismo tienen características antiinflamatorias. La gaceta Nutrition Research apunta que la naringenina, un género de flavonoide que está en los cítricos y en la mano de Buda, actúa como un inhibidor natural de los procesos inflamatorios.

Buñuelos de atún con huevo cocido

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