Cómo se come el tomate seco

Los tomates secos en aceite de oliva son muy simples de realizar y aliñan perfectamente un sinnúmero de platos. Añádelos a una ensalada, una pizza, una tostada de ricotta, un plato de verduras frías y goza del profundo gusto del tomate.

Los tomates secos me recuerdan a Grecia. Allí, los tomates saben a tomate y, adjuntado con las berenjenas, son las verduras mucho más propias de su cocina. En verdad, son un recuerdo propio de las islas griegas. Sí, de ahí que aprendí a humectar, a despuntar, y de ahí que me comenzó a agradar añadir tomates secos a mis platos.

PREPARACIÓN de tomates secos caseros

  • Para elaborar tomates secos se escogen tomates de tamaño y color traje. Los mucho más correctos para esta receta son los tomates ciruela, y cuanto mucho más pequeños y dulces sean, mejor van a quedar.
  • Lavar y SECAR (es esencial) con un paño, recortar en el medio a lo largo y espolvorear con sal fina.
  • Se ponen AL SOL con las semillas hacia arriba sobre una área limpia y plana (o mejor sobre una reja que puede ser el horno, por servirnos de un ejemplo). El único inconveniente que puede aparecer son los insectos (avispas, hormigas…), conque busca un espacio donde sea simple resguardar los tomates con una mosquitera de lona o metálica.
  • Por la tarde se sacan los tomates a un espacio seco hasta la mañana siguiente. Es esencial que no reciban humedad.
  • Va a tomar de 4 a 7 días en verano, o el tiempo preciso en cualquier estación, a fin de que las piezas se vuelvan frágiles.
  • En las próximas fotografías podéis ver el desarrollo de secado de los tomates.

Evita la anemia por deficiencia de hierro:

Media taza da 2,5 miligramos de hierro, o el 14 por ciento del valor períodico sugerido. El hierro es un mineral escencial para la hemoglobina, que es el ingrediente de los glóbulos colorados que transporta oxígeno a las células del cuerpo. La deficiencia severa de hierro puede ocasionar anemia y síntomas de fatiga, debilidad muscular y también infecciones usuales. La vitamina C asistencia al cuerpo a absorber el hierro de los alimentos vegetales como los tomates.

Comer tomates secos puede contribuir a achicar los escenarios de colesterol LDL y el peligro de desarrollar patologías del corazón. Una porción de 2 onzas da 3 gramos de fibra dietética, o el 14 % del valor períodico. Una dieta rica en fibra puede contribuir a achicar los escenarios perjudiciales de colesterol LDL. grasa y colesterol.

¿Por qué razón son seguros los tomates secos?

Seguramente te vas a estar preguntando por qué razón si dejo un tomate ahí en la encimera, se estropea y estos no. Bueno, va a ver, de la misma nosotros, las bacterias, los hongos y las diastasas precisan un ambiente conveniente para vivir, en caso contrario, mueren. Algo mucho más espectaculares es el agua. Uno que tiene dentro frutas y verduras. Bueno, si los atrapamos y tomamos su agua, creamos un desierto. Poco puede vivir allí. Si además de esto agregamos un pretratamiento como el escaldado (en la situacion de los tomates asimismo nos asiste a eliminar la piel), suprimimos mucho más bacterias. Por norma general, cualquier cosa que tenga un contenido elevado de azúcar y ácido es segura para secarse al sol

Este secado al sol es verdaderamente excelente si tienes espacio. La raza humana, generalmente, estuvo realizando esto a lo largo de diez.000 años, nada menos. La primera estación seca, o por lo menos la mucho más vieja que se encontró, data del año 8000 aC en el sur de Francia (Kröll y Kast, 1989). Los tomates no estaban desecados (pues son originarios de América y aún no habían llegado a Europa en ese instante), pero sí las frutas, el pescado y los cereales. La radiación del sol no cuesta nada, no es necesario abrasar leña ni carbón… solo hay que estar pendiente del tiempo y de los bichos.

Pasito a pasito

La primera cosa que debemos llevar a cabo para elaborar esta receta es remojar los tomates en agua no muy caliente a lo largo de por lo menos una cuarta parte de hora. Una vez pasado el tiempo, colócalas adjuntado con el resto de elementos en el vaso de un procesador de alimentos.

Combinar todo bien hasta conseguir una textura semisólida homogénea. Si elige mucho más líquido, sencillamente añada una mayor proporción de agua.

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